10 ene 2011

¡¡¡¡Ya estoooy de vuuueeeeltaaaaaaaaa!!!!


Bueenoooo gente!! Vuesto blogger preferido ya esta de vuelta!! Sé que estabais ansiosos por mi vuelta, sé que Internet no sería lo mismo sin mi blog, así que por haceros un favor (a vosotros) y mejorar la Red: I'M BACK!!!

Para empezar voy a hablaros de los aviones, que bonitos ellos ¿eh? con sus alas, sus motores; esa sensación de cosquilleo al despegar, esas vistas desde el cielo donde parecen los coches punticos negros... Y que importante la "Tripulación", el piloto, el copiloto, el ayudante, las azafatas, sin ellos no se puede volar esta claro ¿no?. Pues resulta, que como yo tengo un mal de ojo o algo parecido (con el tema este de los vuelos y los aviones), justamente esa parte tan IMPORTANTE en un avión, la TRIPULACIÓN, estaba desaparecida, nadie los encontraba ni nadie sabía donde estaban.

Os pongo en situación: 11.30 horas de la mañana del sábado 8 de enero del dos mil once, me dispongo a hacer una mega cola para poder embarcar, media hora después llego al stand donde esta la azafata y SORPRESA!! Tengo que pesar la maleta de mano, ¿Adivináis cuanto pesaba? No hace falta, ya os lo digo yo: 9,98 Kg; teniendo en cuenta que lo máximo son 10 Kg no esta nada mal ¿eh?, si el stand de la azafata fuera el del "Precio Justo", me hubiera llevado el apartamento de Torrevieja!!


Total, que paso el control, nos hacen bajar unas escaleras y ahí estamos todos los pasajeros, esperando 1 hora, enfrente de una puerta de cristal, a que viniera un autobús y que nos llevara donde está el avión. Al cabo de 1 hora aparece una señora muy maja y nos dice que subamos y una vez arriba nos informa de la situación: "Siento comunicarles que no encuentran a la tripulación" ¿¿Cooomooo?? Esto ya si que es la leche, lo que no me pase a mi en los aeropuertos no le pasa a nadie. En fin, resignado voy hacía la salida de la puerta de embarque y esa misma azafata me da un cartoncito amarillo, mirala ella que maja, encima que tengo que esperar una hora más, me da un trozo de cartón y me dice que no lo pierda, ale una preocupación más...

Pasada una hora más por fin se enciende la pantallita de embarque y tooodo el mundo de nuevo a hacer cola, 35 minutos más tarde estaba ya acomodado en mi asiento del avión, al ladico del ala derecha. Total: 2 horas y 45 minutos de retraso. Casi Ná! En fin, el vuelo limpio, sin turbulencias. Dejaba atrás una tierra con 20ºC y llegaba a otra a -5ºC y todo nevado de nuevo!! Si es que no puedo tener tan mala suerte... Deje en Diciembre Edimburgo nevadito hasta arriba y al día siguiente de irme, subieron las temperaturas, llovió, se llevó la nieve y estuvieron todas las navidades tranquilos; pero claro, yo no estaba. Y justamente la noche antes de viajar, va y se pone a nevar de una manera que no veas, tanto que durante las primeras horas del día, el aeropuerto de Edimburgo estaba cerrado; bueno, resultado final, nieve de nuevo... Os dejo el vídeo para que lo comprobéis...


Después de toda la odisea, las casualidades, la suerte, la no tan buena suerte, etc. por fin llegaba a Princess Street (que es donde te deja el bus) y de ahí hasta mi casa me quedaban 15 minutos de ardua travesía por calles nevadas, calles con placas de hielo brutales, arcenes negros de nieve blanda coloreada con un tinte de aceite y neumático, así que imaginaos... Pero lo bueno de ese caminito fue el silencio que existía, la sensación de frío, la oscuridad, las luces... hasta que me encontré con una "típica" cabina de teléfono (la cual me la cruzo siempre pero nunca le hago caso), me paré, la miré y me dije: "Oye, que no tienes ninguna foto de las cabinitas estas", me autocontesté: "Pues tienes razón, foto al canto!" y aquí el resultado. Si os fijáis, en la foto se pueden apreciar las sensaciones anteriormente descritas: Oscuridad, luces, silencio, frío, nieve...

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